jueves, 9 de mayo de 2013

sábado, 27 de abril de 2013

Gira Academica Antigua Guatemala


Tema
 Informe de la gira académica a La Antigua Guatemala, durante el período comprendido entre el sábado 21 y domingo 22 de abril de 2013.

Objetivo Superior

Aplicar los conceptos aprendidos en los curos de micro economía y servicio al cliente.

Objetivos
Específicos Ejemplificar el comportamiento de la oferta y la demanda dentro del mercado turístico. Evaluar el servicio al cliente en la cadena de valores


Introducción
Como parte de la experiencia académica que se pretende tenga todo profesional formado en la Universidad, se realizan con frecuencia giras educativas y trabajos de campo. Éstos solucionan los problemas que se tienen en el salón de clases al no poder poner en directa práctica los conceptos aprendidos. Para esta oportunidad, en el curso de Teoría Económica I, se nos planteó la posibilidad de analizar el mercado potencial y existente en el municipio de Antigua Guatemala, departamento de Sacatepéquez, evaluar la cadena del valor en turismo y ejecutar la comparación entre los conceptos estudiados en clase y su realidad en el campo de estudio. La Antigua Guatemala fue la primera capital de Centroamérica. Rica en cultura e historia, esta ciudad empedrada, representa en todo su esplendor el legado heredado durante la Conquista. Monumentos arquitectónicos, iglesias, conventos y monasterios entre otros, una riqueza cultural, arquitectónica y de tradiciones que darán en su conjunto una experiencia llena de misticismo y tradición. Declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1979. Se conoció por primera vez como “La Antigua Guatemala” el 24 de julio de 1774, luego de que varias cedulas reales fueron emitidas para lograr el traslado. Incluso una de ellas, del 28 de julio de 1777, que ordenaba determinantemente el abandono de toda propiedad antes del mes de marzo el próximo año cuando se realizaría la demolición de la ciudad. Se requería todo elemento utilizable para construir la nueva ciudad en el valle de la Ermita. Los edificios gubernamentales y eclesiásticos fueron despojados de todos sus muebles y adornos. Sin embargo nunca fue abandonada a pesar del desmantelamiento y esfuerzos militares de la época, en vez de ello las personas reconstruían sus casas nuevamente a pesar de las prohibiciones de construcción en la ciudad. Poco a poco el gobierno fue perdiendo interés en dichas cédulas reales y al transcurrir el tiempo.
La Antigua Guatemala contaba con cierta población importante estadísticamente por lo que se celebró u cabildo el 12 de abril de 1779 al ser nombrado Alcalde el señor Lorenzo Montufar. Los factores externos a las ruinas fueron degradando sus estructuras aunque la población siempre tuvo el deseo de reconstruirlas, incluso en 1813 se llevó a cabo la reconstrucción de la Catedral. Así, en las siguientes páginas, encontrará un resumen de las actividades más relevantes realizadas durante los días sábado 21 y domingo 22 del corriente, poniendo en práctica los objetivos didácticos del capítulo 4 del libro Introducción a la Economía para Turismo; atendiendo a la necesidad de experimentar el mercado turístico que ofrece la Antigua, su éxito y debilidades desde el punto de vista del turista y del empresario. Justificación El presente informe responde a las interrogantes planteadas en el salón de clases; modelos económicos, factores económicos, aplicación de las leyes económicas (oferta y demanda), equilibrio del mercado. Conociendo que el movimiento del intercambio ha estado en fluctuación en los últimos años, debido por una parte a la recesión, factores externos como el clima, poca o nula inversión, problemas políticos, tratados de comercio que están en beneficio de particulares, potenciación de nuevos destinos turísticos, diversificación de la oferta.

                  
                  Gira Académica
1. Paseo de los Museos (Casa Santo Domingo) Es una ruta cultural creada en virtud de un convenio entre la USAC y el hotel Casa Santo Domingo. Esta ruta hace posible la visita a los museos instalados en los que fueran Templo y Convento de Santo Domingo, y al Colegio Mayor de Santo Tomas de Aquino. Lugares que durante la época de la dominación española constituyeron una sola unidad. El museo colonial contiene obras producidas durante los siglos XVI, XVII, XVIII y principios del XIX. Incluye pinturas religiosas, piezas de platería, tales como atriles, custodias, coronas y copones; esculturas en madera doméstica y gran formato de arcángeles, santos, vírgenes, querubines, animas y metales pintados. El museo arqueológico exhibe objetos de cerámica y piedra, tales como figurillas femeninas, vasos, platos, cuencos, urnas funerarias, incensarios, hachas y yugos ceremoniales, que en su mayoría corresponden al periodo clásico (200-900 AD) de la cultura maya. Así mismo cuenta con una colección de hojitas coloniales de cerámica que se utilizaron probablemente para almacenar granos o líquidos. El museo de arte precolombino y vidrio moderno ofrece una muestra comparativa de objetos prehispánicos elaborados en cerámica y piedra y otros de vidrios recientes. A lo largo del trayecto, podemos observar los talleres de cerería y loza mayólica, dos grandes expresiones del arte tradicional de la Antigua Guatemala. El museo de artes y artesanías populares de Sacatepéquez alberga una muestra de las antiguas tradiciones artesanales de los pueblos de esta región tales como: loza vidriada, cerámica pintada, pirograbado, hierro forjado, velas, carpintería y ebanistería, hojalatería, tejidos y barriletes entre otros. Otros lugares significativos son las criptas de entierro o velación entre las que destaca la Cripta del Calvario, en la cual se localizó una extraordinaria escena de la crucifixión, realizada en estuco policromado y fechada en 1683. El Paseo de los Museos ofrece al visitante espacios placenteros que garantizan la preservación y divulgación del patrimonio cultural de Guatemala.

2. Mercado de Artesanías
Este interesante mercado exhibe productos artesanales variados, elaborados por “auténticos” artesanos antigüeños.

3. Cerro de la Cruz
El Cerro de la Cruz domina la Antigua Guatemala y para todos aquellos enamorados de la Antigua saben que no hay mejor lugar para observarla que el mirador Cerro de la Cruz. Es un lugar maravilloso desde el cual se puede ver la ciudad colonial, sus techos de teja y sus paredes de colores rojos, amarillos o azules, las ruinas de las antiguas iglesias y conventos, y la majestuosa imagen del volcán de agua en el fondo. El acceso a la cima del cerro, donde se encuentra una enorme Cruz de piedra y a la cual se debe su nombre, se puede hacer en carro o a pie. Si se decide hacerlo caminando hay que subir un camino con gradas, aunque hay que saber que para muchos esto puede ser demasiado, pero cualquier esfuerzo vale la pena pues la vista panorámica es espectacular.

 4. Iglesia y Convento La Merced
Su exquisita fachada de estilo barroco muestra un extraordinario trabajo ornamental realizado de estuco. En el interior del convento también se puede apreciar una de las fuentes más grandes de la ciudad.

5. Convento de las Capuchinas
Templo de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, diseñado en 1731 por el arquitecto mayor Diego de Porrez, fue el último edificio religioso fundado en la ciudad en 1736. La iglesia estaba dedicada al Arcángel San Miguel, la fachada del templo está elaborada en piedra labrada en lugar del estuco tradicional. El claustro principal tiene columnas anchas y bajas, diseñadas para resistir los sismos. La torre de retiro, un edificio de planta circular único durante esa época, tiene 18 celdas alrededor del patio central y cada una poseía su propio retrete. El templo sufrió daños con los terremotos de 1773; a pesar de todo, Capuchinas es uno de los monumentos que mejor se conserva. Desde 1972 este monumento es la sede del Consejo Nacional para la Protección de la Antigua Guatemala (CNPAG).

6. Iglesia y Convento de San Francisco
Dentro de este templo se encuentra la tumba que guarda los restos del Santo Hermano Pedro de Betancourt, quien en el periodo colonial realizo mucha labor caritativa y de ayuda a los pobres, siéndole atribuidas cualidades milagrosas.

7. La Casa del Jade
Al venir los españoles, los Mayas decidieron proteger su más valioso tesoro… el Jade. Escondieron la fuente de donde extraían esta preciada piedra y así pasaron unos cuantos siglos en el olvido, hasta un 9 de Julio del año 1977, en el que Casa del Jade abre sus puertas al público. Casa del Jade fue fundada por Gerald Leech, quién ha estado a cargo del área Administrativa desde entonces, siendo uno de los cuatro fundadores de la moderna industria del Jade en Guatemala. Casa del Jade en la actualidad, cuenta con un total de 70 colaboradores de tiempo completo y medio tiempo, convirtiéndose en una fuente importante de trabajo para los pobladores Antigüeños y de pueblos aledaños en la industria formal de Jade.




Descripción de normas de conducta para la gira educativa
Visita a la Antigua Guatemala 2013.
 Cumplir con la cuota monetaria establecida para la gira educativa.
 Ser puntuales con el itinerario durante la gira.
 No realizar actividades fuera del itinerario.
 Mantenerse siempre en el grupo de compañeros.
 No incluir personas ajenas a la institución durante el viaje.
 No faltarle el respeto al maestro encargado.
 Al momento de realizar cualquier cosa, siempre avisarle o pedirle permiso al maestro encargado.
 Ser responsables de nuestros actos.
 Ser educado en todo momento.
 Respetarnos como compañeros.
 Guardar siempre la buena imagen como estudiantes.
 No llevar objetos de valor, si consideramos no poderlas cuidar.
 Si salimos de las instalaciones donde nos encontramos avisarle al encargado. o Descripción de vestimentas y equipo básico que se llevará a la gira.
 Pantalón de lona o short cómodo.
 Zapatos o tenis cómodos.
 Sudadero o suéteres ligeros.
 Protector solar.
 Gorras.
 Agua pura o bebidas rehidratantes.
 Ropa y accesorios para ambiente cálido

Autor: Manuel Mendieta, Olga Queche, Jose Luis Martin

jueves, 13 de octubre de 2011

El Bono 15 de Baldizon

Por:JOSé RAúL GONZáLEZ MERLO

De todas las promesas de campaña,ninguna ha capturado más la atención que la hecha por el señor Baldizón: el bono 15. La audacia y astucia de prometer una nueva prestación laboral por decreto y las cantinflescas explicaciones de cómo se pagaría no solo la convierten en la “madre de todas las promesas electorales”, sino que también definen el carácter de aquel que está haciendo la promesa. ¿Quién no quisiera gozar de los beneficios de un decimoquinto salario? “Es para el pago de los útiles escolares”, promete el candidato.


Seductora, atractiva y populista promesa de campaña. Seguramente, el voto de muchas personas ha sido influido, al margen, por la ilusión de ese bono. Después de todo, para eso son las promesas de campaña, ¿no? Como dijo Alfonso Portillo, “los candidatos son vendedores de sueños”.
Para que usted se crea en el sueño del bono 15, debe creer también que el Congreso es capaz, por decreto, de crear riqueza. A partir de ese supuesto, la promesa del bono 15 nace muerta. La riqueza y las prestaciones laborales no se crean por decreto; mucho menos por promesa de campaña presidencial. Para comenzar, al iniciar este año solamente uno de cada siete personas de la población en edad de trabajar —más de 10 millones— estaba afiliada al IGSS. Eso quiere decir que seis de cada siete trabajadores operan en el sector informal, en donde no se paga el bono 14, mucho menos el bono 15. En esas empresas no hay suficiente inversión de capital para aumentar la productividad de la mano de obra y poder pagar las “prestaciones legales”. Esa es la realidad. Ni siquiera Supermán la puede cambiar.
El bono 15 equivaldría a un aumento anual de 7 por ciento en el salario nominal de los trabajadores que lo reciban. De las cifras del IGSS podemos estimar que su costo sería de unos Q2 mil 500 millones. Pero para poder recibirlo habrá que generar un aumento similar en la productividad de la mano de obra. Si no es así, lo que pasará es que las empresas deberán disminuir el número de sus empleados. Eso significa mayor desempleo y mayor pobreza. Acá es donde comienzan las respuestas al estilo del cómico mexicano Cantinflas. Dice el candidato que, como también bajará los impuestos de las empresas con el famoso flat tax, de ahí saldrá el dinero para el bono 15. En el mejor de los casos, y en buen chapín, va a desvestir un santo para vestir a otro, porque el fisco recaudó, justamente, unos Q2 mil 500 millones por concepto de Impuesto de Solidaridad en el 2010. Y ahora vaya usted a averiguar si le salen las cuentas del mentado flat tax y qué hará con el déficit fiscal o la deuda pública…
El bono 15 es una oferta electoral audaz, desafortunada y demagógica. Engaña a las personas y las ilusiona cruelmente para que voten por el candidato, haciéndoles creer que la riqueza se crea por decreto. Peor aún, fomenta aquella actitud populista de hacer promesas irresponsables con tal de llegar al poder. Insulta la inteligencia de los electores y los pone a prueba para determinar si somos tan ignorantes o inocentes de creer, de nuevo, en los “vendedores de sueños”.

viernes, 27 de agosto de 2010

Los refugios comerciales

Guatemala, domingo 27 de junio de 2010

Ante la falta de espacios públicos cómodos y seguros, los capitalinos se refugian en los malls para entretenerse y socializar. Allá afuera, la realidad no es tan agradable.
Paola Hurtado phurtado@elperiodico.com.gt

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Más fotos

Edad de algunos centros comerciales capitalinos
Montúfar 1966
Zona 4 1971
Aguilar Batres 1973
Montserrat 1977
Peri-Roosevelt 1988
Megacentro 1989
Pradera 1993
Próceres 1993
Metronorte 1995
Tikal Futura 1996
Miraflores 2003
Pradera Concepción 2005
Oakland Mall 2008
Fontabella 2008
Eskala Roosevelt 2009
Fuente: cada centro comercial.
Los clientes de Miraflores
Miraflores, según sus desarrolladores, es el centro comercial más visitado del país. Reporta un promedio de 27 mil vistas diarias y 950 mil mensuales. En diciembre suben a 1.3 millones.
Entre semana, los usuarios de Miraflores permanecen un promedio de 1.20 horas. Un sábado, 1.54 horas.
90 por ciento va acompañado. 65 por ciento va fines de semana y 33 por ciento entre semana.
Los 25 centros comerciales del área metropolitana suman 680 mil mts2 de construcción, generan 17 mil empleos directos y representan US$700 millones de inversión. Generan 11 millones de visitas anuales a un promedio de 3.5 veces al mes por habitante de la ciudad, según un estudio de Spectrum.

Los clientes de Pradera y Metrocentro
En Galerías Pradera, el promedio de visita es de 1.10 minutos y los clientes lo frecuentan 4.5 veces por mes. Conteos manuales han detectado que entre 4 y 5 visitantes sale con un paquete. En Pradera Concepción, permanecen 2.5 horas y lo frecuentan 3.8 veces al mes. De 3 a 4 visitantes sale del mall con un paquete.
En Metrocentro el 40 por ciento de los clientes acude 1 a 2 veces por semana, 30 por ciento cada 15 días y 19 por ciento entre 3 y 4 veces por semana. Permanecen de 2 a 3 horas en promedio.
Los guatemaltecos tienen varias motivaciones para ir a los grandes centros comerciales. Pero la principal no es comprar. Llegan, principalmente, a juntarse con amigos, a comer, a pasear. También a observar cómo se visten los demás y copiar sus maneras de andar. A distraerse del trajín de la semana. A caminar.

Todas aquellas actividades sociales que hace un siglo se desarrollaban alrededor del Parque Central, y que en su tiempo fueron la razón de ser de la Sexta Avenida de la zona 1, se realizan ahora en el interior de estas plazas techadas.

Los centros comerciales son espacios que le ofrecen al capitalino lo que la ciudad le niega: un lugar para andar despreocupado sin miedo a ser asaltado (o arrollado). Un sitio para conversar, ver gente y ser visto. Para estacionar el carro, cambiarle los pañales al niño y usar el baño.

Los desarrolladores de centros comerciales son los empresarios que mejor conocen los hábitos de ocio y socialización de los capitalinos. Tienen claro que, después del barrio, el trabajo y la escuela, los malls son los principales sitios de convivencia y que es ahí donde convergen buena parte de las actividades sociales y de entretenimiento de los habitantes.
Donde también se imitan comportamientos y modas.

Han estudiado y observado a los clientes por más de dos décadas, cuando comenzó a florecer la construcción de centros comerciales en la capital, y pueden precisar con cifras y porcentajes lo que hacen adentro de ellos.

Saben, por ejemplo, que el capitalino visita un promedio de 3.5 veces al mes un centro comercial y que se queda ahí una media de 2 horas. Que el 90 por ciento de las veces va acompañado, que la mitad de los visitantes sale con un paquete en la mano y al menos 8 de cada 10 beben o comen algo.

El primer gran centro comercial de la capital se abrió en septiembre de 1966, hace 44 años. Fue el Centro Comercial Montúfar, en la zona 9, y era –como ahora– una plaza abierta con locales alrededor. Montúfar se convirtió en el principal punto de compras de los que se habían desplazado del centro de la ciudad hacia las nuevas zonas, cuenta María Elena Schlesinger, periodista y estudiosa de la historia de la ciudad.

Pero el concepto de mall ha cambiado mucho en estas últimas décadas. “Antes, la gente buscaba sólo conveniencia: encontrar en un punto todo lo que necesitaba. Luego demandó variedad, opciones para lo que quería. El siguiente nivel fue el entretenimiento y ahora también pesa la experiencia: qué experimentan y sienten los visitantes en un centro comercial”, explica Ramiro Alfaro, gerente general de Spectrum, la empresa desarrolladora de Miraflores y Oakland. Estos dos comerciales abiertos entre 2003 y 2008 registran juntos más de 1 millón 450 mil visitantes mensuales.

Hay al menos 9 factores que determinan que el capitalino elija un centro comercial u otro. Y no son precisamente los más predecibles. Los desarrolladores de hace 40 años se habrían quedado con la boca abierta al escuchar la lista que elaboró Multiproyectos, el desarrollador de la cadena de centros comerciales Pradera.

En primer lugar, los clientes buscan mercadería; en segundo, servicio y en tercero ¿adivina? tipo de clientela. “Buscan que la gente que va a ese centro sea conocida, de su nivel socioeconómico. Para el visitante es importante ir al mismo lugar que su grupo”, explica Luis Villela Saravia, director de centros comerciales de Multiproyectos. En cuarto lugar está la ubicación y le siguen la seguridad, las promociones, el diseño, la identidad del mall y el servicio post venta.

Galerías Pradera abrió en agosto de 1993 en zona 10, apenas un mes antes que el Centro Comercial Los Próceres, frente al Obelisco. Tras varias remodelaciones y la implementación de nuevos servicios, y pese a la competencia, ambos siguen siendo dos de los principales malls de la ciudad.

Los centros comerciales observan y estudian todo el tiempo a sus clientes para saber qué hacen, qué desean y necesitan, para mantenerse actualizados ante sus demandas. Las cámaras de Galerías la Pradera no solo sirven para resguardar la seguridad de los visitantes. También son útiles para detectar en qué áreas caminan más, cuánto tiempo observan las vitrinas, qué compran, cuánto tiempo permanecen en el mall. En Pradera se visualizan los videos en “cámara rápida” para determinar estos movimientos y se marca con rojo, amarillo y verde las zonas de menos o mayor afluencia. En función de esos colores se cobra la renta a los arrendatarios.

Todos los centros tienen “anclas” y “mini anclas”; es decir, “imanes” de clientes. Se consideran anclas todos los negocios que le generen al comercial más del 15 por ciento de ingresos. Anclas son los cines, un supermercado, una tienda por departamentos o el food court (punto de restaurantes). Mini anclas, detalla Villela, pueden ser un gimnasio, un café, una famosa tienda de deportes.

¿Qué debe tener un centro comercial para atraer gente? saber todo el tiempo lo que la gente quiere, responden Alfaro y Villela. El mercado va cambiando, hay competencia y hay que adaptarse.
Después del boom
Según los estudios de Spectrum, en la metrópoli guatemalteca (las 22 zonas y los municipios cercanos) hay 25 centros comerciales de más de 10 mil metros cuadrados de construcción rentables y con una estructura básica de mall techado y corredor central.

La mayoría de estos centros comerciales se construyó a partir de los años noventa. Los factores que han determinado este “boom” son la urbanización, la densificación de poblaciones y el crecimiento económico de la ciudad, señala Alfaro.
Los malls cobran tanta relevancia comercial y social en ciudades como esta debido a la falta de espacios de recreación, opina Édgar Montúfar, sociólogo de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

Los centros comerciales están pensados para atender cualquier necesidad del visitante: comida, estacionamiento, baños, seguridad, diversión y entretenimiento. Los más modernos, además, incluyen áreas jardinizadas para hacerlos más agradables y que la gente quiera permanecer más tiempo. En tanto que los espacios públicos de la ciudad, como los
parques, además de inseguros no ofrecen estas comodidades. A veces ni siquiera jardines.

Los malls, amplía Montúfar, son espacios donde conviven diferentes estratos sociales, aunque cada uno realice actividades con distinto orden y prioridad. Si bien es cierto que la mayoría consume alimentos, para algunos implica un almuerzo del día, para otros, la comida familiar del fin de semana y para otros, la forma de celebrar un cumpleaños, según el nivel socioeconómico.

Los centros comerciales de la capital están dirigidos a un segmento socioeconómico ABC, detalla Alfaro, y se pueden dividir en varias categorías, según el público que los visita y los servicios y bienes que ofrecen. Están los de conveniencia y utilitarios, donde la gente va porque son prácticos y de fácil acceso, y los “fashion” y aspiracionales, que son de diseños modernos y atractivos.

Algunos como Oakland Mall encajan holgadamente en esta segunda categoría y Metronorte en la primera, opina Alfaro.
Otros son la mezcla de ambas.
En las periferias y los departamentos
Metrocentro fue el segundo gran mall de Villa Nueva. Está ubicado en el segundo municipio más poblado del país, después de Guatemala. Es una ciudad dormitorio, en el límite con otros municipios del departamento. En un radio de 5 kilómetros hay medio millón de habitantes, aunque no todos son potenciales clientes: a pocas cuadras del centro comercial se encuentra uno de los asentamientos más grandes de Latinoamérica.

En medio de esta complejidad poblacional y social, el centro abrió hace siete años y medio. Los estudios previos señalaban que los villanovanos estaban acostumbrados a comprar en la tienda del barrio, en los mercados municipales y en la capital, cuenta Karina Ayala, gerente de mercado del Grupo Roble, el desarrollador de este y de otros 19 malls en Centroamérica.

En menos de cuatro años esos hábitos cambiaron. La mayoría de habitantes del municipio realiza sus compras en Villa Nueva. Metrocentro está dirigido al nivel socioeconómico C típico, C menos y D; o sea clase media y popular. El visitante promedio del comercial son jóvenes que vivían en la capital y al casarse se trasladaron a Villa Nueva o los municipios limítrofes como San Miguel Petapa y Villa Canales. Tienen entre 25 y 45 años, de 2 a 3 hijos en edad escolar y aspiran a mejores oportunidades de educación para sus hijos. Desean cambiar el carro por uno de modelo más reciente y tener una casa más bonita y con más servicios. También es una familia que le gusta divertirse, pero no siempre tiene la posibilidad de destinar un gasto importante al entretenimiento, enlista Ayala.

Con ese conocimiento de sus clientes, a Metrocentro no le cuesta atraerlos. Su oferta está enfocada a estas características. El comercial agenda para todo el año una serie de actividades de entretenimiento gratuitas como obras de teatro, conciertos y shows, todas dirigidas a las familias. El diseño del mall además incluye acabados de lujo, para cumplir esa función aspiracional de querer mejorar y vivir en un ambiente agradable. Metrocentro recibe entre 8 y 9 mil visitantes diarios entre semana y hasta 16 mil los domingos.

El mercado de los centros comerciales aún es explotable, opina el gerente de Spectrum. En Guatemala hay entre 2 y 3 metros cuadrados de área de comercio al detalle por habitante (esto incluye todo tipo de comercios), mientras que en México hay entre 3.5 y 5 metros y Estados Unidos, el rey de los malls y el consumo, entre 20 y 35 metros cuadrados. “Mercado hay, pero no en todos lados, hay que saber en dónde”, aclara.

Los desarrolladores ya giraron su vista hacia otros sectores que no sean los más explotados y rentables hasta ahora: Obelisco, carretera a Antigua y carretera a El Salvador. “Sería muy atrevido construir otro centro comercial ahí porque el mercado ya no da para más”, opina Villela.

De hecho para Multiproyectos, que tiene la cadena de malls más grande del país (2 en la capital y 12 en cabeceras departamentales) y a los que les ha invertido US$100 millones, su proyecto más exitoso es Pradera Xela con medio millón de visitantes al mes y una lista de 100 comerciantes que esperan turno para alquilar un local.
La deuda con los ciudadanos
Hay una disputa entre franceses y estadounidenses sobre quién inventó los malls. Los primeros, cuenta Villela, defienden que a principios del siglo XX convirtieron una estación de tren en desuso en un punto de reunión de varias tiendas dispersas en la calle. Los estadounidenses también se atribuyen la idea.

En todo caso fueron los gringos quienes desarrollaron el concepto y dieron paso a las moles de sus ciudades. Los más grandes de Guatemala, que miden entre 30 y 40 mil metros cuadrados de construcción rentables, son como los pequeños o medianos de Estados Unidos.

Los malls se han constituido en escenarios de mayor seguridad para los ciudadanos, aunque no quiere decir que sean completamente seguros. Pero hacen que la gente salga de sus casas, de sus oficinas y de sus carros y realice en estos lugares actividades sociales y familiares. Para los habitantes es bueno, pero para las ciudades no tanto, opina Hugo Acero, sociólogo colombiano, ex subsecretario de la alcaldía de Bogotá y con experiencia en convivencia y seguridad ciudadana.

Con la proliferación de los centros comerciales hay un proceso de traslado de los comercios hacia estos puntos y las antiguas zonas comerciales comienzan a abandonarse”, resalta Acero entrevistado por teléfono. El fenómeno se replica en toda Latinoamérica. “El objetivo de las administraciones municipales debe ser el de recuperar y garantizar la seguridad para que las zonas comerciales abiertas y no ligadas a centros comerciales permanezcan y se fortalezcan, para volver a atraer el comercio, las oficinas y la vivienda al centro urbano”, acota.

Acero dice que los municipios deben recuperar las diferentes formas de socialización perdidas, como los parques, las calles, las plazas, para que el ciudadano vuelva a caminar. Los malls, reconoce, son de beneficio para los ciudadanos, pero son espacios limitados que fomentan principalmente el consumo y no dan paso a las actividades físicas. “El visitante llega en carro, usa escaleras eléctricas, come una hamburguesa, ve una película, se sube al carro y regresa a su casa”, resume.
“La actividad física se pierde”. Y el problema de fomentar el consumo es que la gente nunca está conforme con lo que tiene y lo que puede comprar, opina Alejandro Alfaro, antropólogo que ha trabajado en estudios de psicología del consumidor. “Como nunca está conforme trabajará más para tenerlo, pero nunca estará feliz y no tendrá tiempo para darse cuenta de que ahí pasa algo malo”.

Montúfar, el sociólogo de Flacso, agrega que con el deseo no atendido “viene la frustración. Y según la teoría de la frustraciones, esta es una –no la única– de las explicaciones de la violencia en las sociedades”. En las sociedades de consumo la frustración es una constante. No significa que los pobres sean los más frustrados o violentos. Sino que cada estrato quiere tener lo que tienen los de los niveles más altos.

Los centros comerciales, sin embargo, también funcionan como válvulas de escape. Para muchos entrar a uno es como pasar del otro lado de la luna del ropero, compara el antropólogo: después de una semana monótona, de 10 horas de trabajo extenuante, las familias encuentran en ellos un escape a su realidad en un ambiente rodeado de belleza, con distractores y servicios por los que no tienen que pagar nada.

Ni la lluvia ni la recesión separan a los capitalinos de los centros comerciales. Con la crisis económica que se agudizó el año pasado, las visitas no bajaron, dice Villela. Siguió llegando la misma cantidad de gente, solo bajó el consumo. Y el sábado que las lluvias de la tormenta Ágatha no cesaban, Miraflores estaba a reventar. Tenía que ver no solo con que no había nada qué hacer en la ciudad, sino que en muchas áreas se había ido la luz y el agua. El país estaba cayéndose pero ahí todo funcionaba con normalidad: el carrousel, los cines, los restaurantes, las tiendas. Los malls, al final de cuentas, también sirven de refugios. Refugios de lo que no nos gusta y no funciona afuera, en la vida real.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Centro de Desarrollo Empresarial en Turismo CEDET

Compañeros, les saludo nuevamente luego de una larga estancia. Les escribo para comentarles que ahora me encuentro incluido en la elaboracion de talleres de empresarialidad encaminados al fortalecimiento economico de la poblacion, estos talleres se llevaran a cabo durante el mes de enero hasta el mes de junio en Sololá y sus alrededores. Les animo para que puedan acceder a dichos talleres, ya que seran de mucha utilidad para cada uno de ustedes y mas aun para la poblacion en general. Tambien se brindaran cursos cortos de actualizacion turistica, hotelera y en restaurantes. por otra parte, les invito a participar en talleres gratuitos de consiencia ambiental y sencibilizacion comunitaria.

Saludos

P.D.: para cualquier informacion porfavor comunicarse al 52706824 o escribir al correo electronico: menro.too@gmail.com.

Gracias y hasta pronto

lunes, 6 de julio de 2009

"Y lograron sin choque sangriendo colocarte en un trono de amor, que de Patria, en energico acento, dieron vida al ideal redentor....."

Hola amigos!

Les escribo en un momento bastante alegre para mi, estoy a poco tiempo de volver a mi tierra hermosa, a mi Guate!durante escribo llevo presente todas las anecdotas que han ocurrido por el valle guatemalteco. Llevo en mis oidos, en este instante en el cual escribo, las notas del himno nacional, que me hacen rtecordar lo bello que es haber nacido en Guate! haber crecido entre ustedes y tener la oportunidad de llamarles "chapines" al igual que a mi..
Tener el don de respirar el humo que despide el cafe mestizo, los tamalitos, los frijolitos volteados; aderezados con huevos revueltos y tortillas bien calientes...

Ver a los niños jugando por la calle, una chamuzca, diciendo:"carro carro"... la sonrisa de las mujeres el dia de plaza.. me hacen recordar lo grande que es mi patria, lo grande que es Guate! sin duda, Guate no tiene nada de mala, Guate no es mala... es CALIDA!

Ojala que remonte su vuelo, mas que el Condor y el Aguila Real... y en sus alas levante hasta el cielo..GUATEMALA tu nombre inmortal!!!

martes, 30 de junio de 2009

GuateAmala es CALIDA!

¡Arriba Guatemala!, con valentía conservemos nuestros valores y desde nuestro entorno particular marquemos la diferencia, aunque tarde más así… CONSTRUYAMOS UN MEJOR PAÍS.

Aca un link, para que vean que , Guatemala es Calida!

http://www.youtube.com/watch?v=zLz-DzmWVhM&feature=related